miércoles, 8 de agosto de 2012

ERNESTO, ¿ HURACÁN, TORMENTA TROPICAL O UN SIMPLE NORTE?


En mis lejanos años de la parvulez, recuerdo con nostalgia las calles de arena blanca y el nido de olas, que como que se medio agitaba o literalmente, se zarandeaba con bastante enjundia, más o menos, similar a la que le ponen los chavos al bailar el erótico baile llamado el “perreo”, cuando pasaba por el golfo de México, en concreto, cercano a nuestra amada isla del Carmen algún huracán, ciclón,  tormenta, lluvia intensa o “norte” que era el apelativo que la población le daba en general.

Como olvidar al Brenda, allá por los años 70 s del siglo pasado, cuando los meteorólogos indicaban que azotaría con mayor fuerza en la isla y muchos se fueron a refugiar al municipio de frontera, tabasco y menuda sorpresa se llevaron los paisanos al devastar inmuebles y gran parte de la flora tropical del hermano sitio. Mientras tanto en  la isla, de un fuerte aguacero no paso con sus respectivas calles encharcadas, árboles caídos, corte de energía eléctrica etcétera, pero, con la venia, diría la grey católica, de la Virgen del Carmen, nada que lamentar.

Como chamacos que éramos, algunos aprovechábamos el torrencial aguacero para salir y sentir los embates de la madre naturaleza gozando, tal vez inconscientemente, el momento y así pasaba, año con año hasta antes de la llegada imprevista de Petróleos Mexicanos, y para albergar a sus trabajadores se construyeron edificios y casas,  cerrando las salidas naturales del agua, amén de tomar una serie de previsiones, dado el desarrollo laboral que se genera en la zona marina, sitio donde conviven más de 5 mil personas, aproximadamente, quienes con su esfuerzo y dedicación, son el soporte económico del país.

Ya en los 90s, la llegada de los huracanes Opal y Roxana devastaron a la isla, que para su mala fortuna, el segundo huracán nos azoto dos veces. Cuenta un paisano avecinado en la capital del Estado que fue como consecuencia que los integrantes del comité de protección civil estatal, pidieron a la población que saliera al kilométrico malecón y soplaran para que se alejara de nuestras costas, solo que como dicen que los campechanos todo lo hacemos al revés, los San Franciscanos lo hicieron succionando el aire hacia dentro con la consecuencia que el Rosana volvió con más fuerza y termino su fechoría, misma, por cierto, que sirvió, para que un trío de funcionarios municipales carmelitas del más alto nivel, al que luego apodarían el grupo “ladrón”, se despachara con la cuchara grande y metiera facturas y gastos casi mayores a los ocasionados hace unos años en nuevo Orleans, engrosando sus cuentas de forma desorbítante y el día de hoy, son millonarios, dos de ellos, en dólares. Digo, el fondo de contingencias para estas cuestiones había que justificarlo.

Pues bien, el meollo de este asunto o la medula del hueso, digo, para meterle sentido coloquial a estas líneas, es la sorpresa que con la llegada del huracán Ernesto, las autoridades de los tres niveles, haciendo uso de decisiones colegiadas por el comité de protección civil respectivo, decretaron  alerta roja a la tormenta tropical llamada Ernesto, suspensión de labores burocráticas, ley seca y ahí es donde la puerca tuerce el rabo: ¿en que afecta que se pueda uno tomar un vinito aderezado con una rica botana compuestas con quesos, surimis, jamones ahumados o ya de perdida, charritos y chicharrones campechanos, orgullo de los productos de exportación estatales?

Ahí vez a la gente, haciendo compras de pánico abarrotando los supers, aun el boicoteado por su papel en la pasada elección presidencial; las atiborradas gasolineras atendiendo enormes filas de automovilistas quienes suponían que un tsunami se aproximaba, uno que otro medio electrónico se encargo de generar en algunas familias, un estado anímico de pánico cuando no debió de pasar de prevención.
Mientras tanto, los aguerridos petroleros continúan en las plataformas marinas desarrollando su labor, no hubo evacuación en esta ocasión, y, muchos de ellos, están confundidos y preocupados por la información que les llega. Cabe mencionar que estas líneas se refieren únicamente a lo respectivo en la isla y no en los otros municipios, sitios en donde, aun no llega la grandeza gubernamental acompañada con la tecnología respectiva, el embate de Neto si está haciendo estragos que, este humilde escribiente, emulo de los de los portales de santo domingo, desea que el daño sea menor, que los fondos de contingencia se apliquen honestamente y no exista pérdidas humanas que lamentar.

Por último, ante la falta de la respectiva coordinación policiaca, los malos de malolandia, diría, Jairo Calixto Albarran, ya hicieron de las suyas y asaltaron una institución bancaria justo enfrente de las oficinas centrales de PEMEX. Bueno, algún detallito se les tenía que escapar a nuestros liberales y heroicos patriotas que nacieron a orillas del mar. Y ahora sí, el ultimo chorrito: no pierda contacto con las redes sociales que ha generado más comunicadores que los que cubrieron las elecciones y los juegos Olímpicos.
 ¡AGUAS CON EL FONDO DE CONTINGENCIAS!
( por aquello de un integrante del grupo ladrón esta en el comité de protección civil local).


                                                                                                                                                                

1 comentario:

  1. Para el ciudadano, que tiene una buena vivienda,con todos los servicios y uno que otro extra, como planta portatil de energia, en pocas palabras un bunker, ernesto y todos los huracanes les hacen los mandados, pero el ciudadano que apenas tiene un tinglado para vivir, a ese se lo lleva la chingada,primero porque no quiere abandonar sus´pocas pertenencias, que con mucho trabajo ha adquirido,segundo verdaderamente hay un plan de respuestas a emergencias,se lo aplica proteccion civil, llegan las ayudas a los mas necesitados,o ahora y despues del paso del meteoro, todo mundo se inundo, y requiere de la ayuda gubernamental o federal, cuando en su momento del (chubasco)los primeros que mencione al principio, se daban su agasajo con chocolate caliente, otras botanas y oliendose sus flatulencias,en el momento de redactar estas lineas, palpe los azotes de las rafagas de vientos,y una lluvia persistente, porque el fenomeno natural se centro en nuestro municipio.
    ojala que la ayuda sea canalizada adecuadamente y a los verdaderos necesitados, no vaya ser cuando llego opal y roxana, llego muchisima ayuda del pais y del extranjero, hasta con ropa de calidad. que al chico rato se pudo ver venta de ropa de bazar por todos lados,he visto a traves como señalabas chuchin muchos ciclones, gracias a dios que neto, no alcanzo la categoria 5 en la escala safir sipson,la mas alta para los metereologos,por que ni con lupa nos van encontrar,saludos lic.

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